A través de este bando el Ayuntamiento de Zizurkil quiere denunciar los hechos acaecidos durante demasiados fines de semana de los últimos meses en la zona de Elbarrena, bajo la cubierta y en los alrededores.

Cuando las medidas en torno a la pandemia se hicieron menos restrictivas, pero aún estaban los bares cerrados por la noche, la cubierta de la plaza Joxe Arregi fue tomada como punto de reunión por varios grupos de jóvenes. Es totalmente comprensible que, tras un largo encierro, tuvieran ganas de reunirse, pero pronto empezaron los problemas: pusieron música hasta la madrugada con bafles que ellos/as mismos/as habían traído  y llegaron los primeros destrozos del mobiliario urbano. Desde entonces, durante muchos fines de semana se ha dificultado el descanso a los vecinos/as y no es fácil cuantificar los daños: destrozos en el mobiliario público, lanzamiento de objetos a las viviendas, rotura de más de 20 señales en las calles adyacentes, incluso la puerta del cuadro eléctrico ha sido reventada varias veces con el peligro que ello supone…

Estamos en contacto con diferentes agentes para analizar lo que está pasando. Somos un pueblo pequeño, el Ayuntamiento de Zizurkil no tiene medios para controlar lo que ocurre los sábados por la noche. Pero que sea un pueblo pequeño no significa que tengamos que aceptar cualquier cosa. Entendemos y apoyamos que se tengan deseos de juntarse y pasarlo bien, pero en ningún caso es admisible lo que están sufriendo los vecinos y vecinas, y este destrozo incomprensible. Queremos extender la petición de que la fiesta se desarrolle con sentido común y expresamos nuestro apoyo a los vecinos y vecinas de Elbarrena.