Fraudes consistes en suplantar la identidad de la víctima para hacerse con un duplicado de su tarjeta sim y así tener acceso a todo su contenido desde otro terminal.
El estafador tiene como objetivo conseguir un duplicado de tarjeta. Con ello “anula” la tarjeta de la víctima y operativiza con la posesión de la segunda tarjeta.
Los medios para hacerse con los datos personales y solicitar un duplicado de la sim son diversos -phishing, malware [p.e. estudios de perfiles en redes sociales]. Los estafadores, con estos datos en su poder, solo tienen que contactar con el proveedor del servicio de telefonía y, haciendose pasar por la victima, solicitar un duplicado de la tarjeta sim.
Por un lado, la recepción de los sms con el código de confirmacion que los bancos generan al realizar operaciones online, permite a los estafadores realizar compras, transferir dinero o solicitar prestamos, entre otros.
Por otra parte, con el acceso a los datos almacenados en la sim se puede incluso acceder la tarjeta bancaria virtual y de esta forma realizar compras en establecimientos o extracciones de dinero de forma presencial.
El montante de estos fraudes es muy amplio, desde pequeños cargos por compras hasta miles de euros por contratación de préstamos y transferencias.